LECCIONES DESDE ASIA: ¿Cómo convertir una crisis mundial en oportunidades para generar valor? La importancia de ser ágil frente a la incertidumbre y la diversidad.

Asia hace 39 años tenía 2 países entre los 5 más ricos del mundo, hace 13 años eran 3 y dentro de 3 años serán 4. ¿Qué está pasando y que podemos aprender de ello?

Lecciones de Asia:
- Optimismo y optimizando. Los directivos asiáticos tienen confianza en el futuro, saben sacar provecho a las nuevas tendencias, como por ejemplo uso de los datos y la innovación digital, además optimizar los modelos operativos para lograr velocidad y agilidad. Somos igual de optimistas, estamos aprovechando la tecnología para optimizar nuestros modelos, lo hacemos de forma rápida…
- El futuro de Asia será Asia: La buena interdependencia con otras empresas asiáticas y cómo perciben a los gobiernos regionales como partes interesadas que agregan valor. Como informó el McKinsey Global Institute (MGI) en 2019, el 60 por ciento de los bienes comercializados por las economías asiáticas se encuentran dentro de la región, y el 71 por ciento de la inversión asiática en empresas emergentes y el 59 por ciento de la inversión extranjera directa es intrarregional. La formación de la Asociación Económica Integral Regional, el pacto de libre comercio más grande del mundo, que comprende a 15 países de la región de Asia y el Pacífico, en noviembre de 2020 augura una integración más profunda. Será sin duda el mayor mercado mundial de comercio. Económicamente, el mercado de bienes entre la Unión Europea y Asia ascendía en 2018 a 1,4 billones de euros y se espera que llegue a los 2,5 billones de dólares en 2025. Cuánto vendemos hoy a Asia o, mucho mejor, cuánto queremos vender en este mercado en el 2025 y qué estamos haciendo para conseguirlo.
- Sólido crecimiento: El mercado asiático crecerá en estatura mundial, dada su población joven (en la mayoría de los países, de todos modos), una clase media en ascenso. Su importancia relativa crecerá tanto en la formación de riqueza como en el consumo. En 10 años la clase media mundial crecerá un 50% (+1.600 millones de personas), +90% de este crecimiento vendrá de Asia. Podemos permitirnos el lujo de no estar presente en el mercado con 2 de cada 3 clientes potenciales, y que representa el 90% de los nuevos clientes.

- Creciendo y saltando. Asia ha desarrollado y profundizado sus capacidades tecnológicas e infraestructura rápidamente. Gran parte del crecimiento mundial en la financiación de la puesta en marcha de empresas de tecnología, el gasto en I + D y las patentes presentadas vienen de Asia. Hay más por venir, dado el potencial de dar un salto en el desarrollo tecnológico de la región basado en la escala de los mercados y la inversión, y en la velocidad de adopción y creación de propiedad intelectual. Tenemos las capacidades tecnológicas necesarias para estos rápidos crecimientos (capital humano y capital financiero).
- Ampliando el crecimiento. Además de China, India y Japón están las naciones emergentes de la ASEAN (Indonesia, Malasia, Filipinas, Tailandia y Vietnam) que comenzaron la crisis en desventaja, pero gracias a cinco palancas clave (centros de fabricación, infraestructura ecológica, inversiones en industrias digitales, de reciclaje de talentos y de alimentos de alto valor) no solo podrían acelerar la recuperación económica en estos países, sino también sentar las bases para un crecimiento extendido (S/Mckinsey). No sólo es China e India nuestro mercado potencial. No podemos olvidarnos de que los llamados tigres asiáticos (Vietnam, Filipinas, Indonesia, Thailandia…) son 2 veces Europa.
- Recapacitación laboral. A medida que se extienden la digitalización y la automatización, es posible que cientos de millones de personas necesiten mejorar y actualizar sus habilidades; algunos pueden necesitar cambiar de ocupación. Es posible que se necesite hasta un tercio de estas transiciones en China. Si China hace esto bien, podría establecer un punto de referencia útil para otras economías. El nuevo informe de MGI, Reskilling China: analiza la revolución de habilidades que el país necesita para seguir mejorando su nivel de vida. Estamos readaptando nuestra fuerza laboral a la nueva economía y esto es válido, tanto a nivel país como a nivel empresarial.
Artículo escrito por Xavier Riba Brat, economista consultor y analista en TRUST BUSINESS PARTNERS.